• Añada

Esta viene determinada fundamentalmente por las condiciones climáticas que se dieron durante el año de la cosecha en la zona en cuestión. Esto marcará la base de la que partirá el vino y determinará si estamos hablando de una buena o una mala añada.

  • Assemblage

Se trata una mezcla más refinada y que se lleva a cabo una vez que el vino ya ha sido elaborado. El objetivo es perfeccionarlo para conseguir de este modo un vino superior.

  • Bouquet

Este concepto hace referencia a los aromas del vino, concretamente a las sensaciones que uno experimenta al acercarse una copa de vino a la nariz.

  • Estructura del vino

Se refieren al equilibrio de sus diferentes componentes, desde la cantidad de alcohol hasta los niveles de acidez y azúcar. Si un componente sobresale del resto, se rompe el equilibrio del vino, perdiendo armonía y resultando áspero al paladar, mientras que aquellos vinos que tengan una buena estructura resultarán más agradables y suaves en boca.

  • Vino joven – crianza – reserva

Estos conceptos que hacen referencia al tratamiento que recibe un vino después de la fermentación.

El vino joven es el que pasa directamente de la cuba de fermentación a la botella y de ahí a las tiendas. Estos vinos es preferible consumirlos durante los dos primeros años.

La crianza son los vinos que pasan de la fermentación a barrica de roble (entre 3 y 6 meses) y después a botella durante 18 meses más antes de ponerse a la venta.

La reserva son los que pasan 18 meses en barrica y otros 18 meses en botella. Si, además, esta maduración se alarga de 3 a 5 años entonces ya estaríamos hablando de una gran reserva. Este sí podrás guardarlo hasta que llegue una ocasión especial.