Si su expendido sabor no te parece suficiente para volverte un amante del vino, aquí te dejamos otras cuatro buenas razones:
- Combate las bacterias bucales.
Un estudio italiano ha demostrado que el vino tinto frena el crecimiento de las bacterias causantes de la caries, además de otros asociados a la gingivitis y los dolores de garganta.
- Reduce el riesgo de cáncer.
Según investigadores la uva del vino ayuda a combatir contra distintos tipos de cáncer: de mama, de pulmón, de colon. Esto gracias a que el compuesto de las uvas puede matar las células madres de la terrible enfermedad.
- Mejora las funciones del cerebro.
Varios estudios científicos han concluido que el consumo de vino ayuda a mejorar la función cognitiva. Además previene la demencia, gracias a que reduce la inflamación del cerebro.
- Felicidad asegurada.
Con el consumo de vino se liberan endorfinas, las sustancias responsables del placer, lo cual permite entrar en un periodo de relajación, felicidad y disfrute